El gobierno coreano ha llevado a cabo su tercera y más potente prueba nuclear subterránea y se sitúa más cerca proveerse con miseles de cabeza nuclear. Estados Unidos, Japón y Rusia ya se han pronunciado en contra de estas acciones y han anunciado que tomarán medidas. Desde el gobierno de Pekín, rechazan estas pruebas nucleares pero piden tranquilidad a todas las partes.